Cuidar el pelo en verano

El cabello es una de las partes de la piel que más sufre durante el verano. Agua y sol lo atacan continuamente y al final su apariencia se ve perjudicada, de modo que a la vuelta se suele optar por un corte para sanearlo. Pero esta opción tan radical se podría evitar. Sólo hay que tener en cuenta una serie de consejos:

• Antes de exponerse al sol se puede aplicar un fotoprotector capilar. Actualmente existen varias marcas que trabajan estos productos (Isdin, Indola…). No obstante, si se quiere ahorrar, algunos expertos recomiendan aplicar en el cuero cabelludo el mismo protector que se usa para la piel. Como estos artículos suelen ser muy espesos lo idóneo es escoger aquellos que se presentan en forma de spray y que son transparentes.
• Tanto si se va a la playa o a la piscina, tras salir del agua es recomendable ducharse para eliminar restos tóxicos, como puede ser el cloro en el primer caso, o de arena si hablamos de mar.
• A la hora de lavarse el pelo lo más importante es escoger un buen champú. Éste, al igual que las cremas y el tipo de dermis, debe adecuarse a la clase de cabello que tenga cada cual. En la Guía Práctica del Cabello para la farmacia, especifican que un buen champú debe lavar sin producir un arrastre excesivo de la grasa ya que su eliminación puede determinar la pérdida de una defensa natural esencial. Además, debe dejar al pelo en condiciones idóneas para el peinado y tener propiedades organolépticas agradables. También puede incluir en su composición sustancias tratantes para distintas patologías que asientan en cuero cabelludo.
• Para aportarle más hidratación se pueden usar acondicionadores tras el champú o incluso mascarillas, aunque en este caso su uso se aconseja cada 15 días o incluso una vez al mes.
• No hay que olvidar que el pelo mojado en más sensible (se rompe con más facilidad) que el seco, por lo que es mejor no usar gomas cuando está húmedo o peinarlo. Lo ideal es pasar el cepillo antes del lavado o esperar a que esté seco.