Vivimos rodeados de gran cantidad de agentes contaminantes y
la calidad del aire interior se ve afectada por todos ellos. Mejorarla puede
ser beneficioso para la salud, teniendo en cuenta que respiramos más o menos
unos 15 kg de aire al día (12 m3), y pasamos de media unas 16 horas
en nuestras casas o un 90% de nuestro tiempo en espacios cerrados. Así, lo ha
contado a Claves de Mujer Isabelle Pacchioni, cofundadora de Puressentiel.
Beneficios de mejorar la calidad del aire interior
Según explica Pacchioni, existen dos tipos de contaminación:
la del aire exterior y la del aire interior, y ambos no están contaminados de
la misma manera. De hecho, hay más concentraciones de contaminantes en el
interior que en el exterior. Entre estos
agentes perjudiciales para la salud destacan los ácaros, el moho, etc.
La contaminación del aire que se respira en espacios
cerrados puede tener consecuencias desfavorables para nuestra salud, “hasta cincp
veces más importantes que la exterior”, apunta la responsable.
Al mismo tiempo respirar mejor ayuda también a dormir mejor.
“¿A quien no le ha costado alguna vez conciliar el sueño por culpa de un aire
demasiado caliente, demasiado seco, cargado de partículas molestas (polen,
polvo…), o demasiado cargado en gas carbónico (en trenes por ejemplo)?
La calidad del aire nocturno en la habitación es igual de importante que el
aire que respiramos durante el día para ayudar a conciliar el sueño y mejorar
su calidad.”
¿Cómo respirar mejor?
Existen varios métodos para mejorar la calidad del aire interior que
respiramos, además de mantener una correcta ventilación se puede recurrir a algunos
productos elaborados para esa finalidad. En particular, a mí me llama la atención
el spray Aire Sano, un pulverizador de Puressentiel con fórmula patentada y que
tiene un estatus biocida 100% natural.
En su formulación se han empleado 41 aceites esenciales compuestos
de diferentes moléculas perfectamente identificadas por cromatografía, que
pertenecen a diferentes familias bioquímicas cuyas propiedades
anti-infecciosas, antisépticas, anti-fúngicas y antiácaros son ahora conocidas.
“Esta composición nos permite tener un amplio espectro de acción demostrando
una eficacia contra determinados virus (como e l H1N1), bacterias (Escherichia
coli, Estafilococo dorado, etc,), y mohos e insectos (chinches de cama y
polillas). Su eficacia está demostrada además por nueve estudios”.
La forma de aplicar este tipo de sprays es muy sencilla,
basta con realizar entre 6 y 8 pulverizaciones en las cuatro esquinas de una
habitación de tamaño medio para sanearla en su totalidad. Se puede
también pulverizar sobre una superficie concreta cuando se busca una acción
acaricida, como por ejemplo en alfombras, colchones, etc.
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