Son más de 1.000 páginas de historia de la Roma de después de Cristo, una novela que nos acerca una vez más al mundo de perversión, de la sinrazón y locura de uno de los Imperios más estudiados de todos los tiempos. Intrigas, codicias, tramas, batallas por mantener a toda costa el Imperio, sexo, celos, pasiones incontroladas…, todo esto para entender cómo Marco Ulpio Trajano llegó a ser el primer emperador hispano de la historia.
Es la primera vez que disfruto de la literatura de la mano
del autor español Santiago Posteguillo y he de decir que su lectura me ha conquistado. Gracias
a Los Asesinos del Emperador, he descubierto aspectos del Imperio Romano que
desconocía por completo en una magistral clase de historia novelada que me ha
ensimismado.
Este libro desvela curiosidades relacionadas con las famosas
luchas de gladiadores y las prácticas tan salvajes que llegaron a practicar los
romanos sobre la arena del Anfiteatro Flavio (el famoso Coliseo que hoy se
erige en la capital de Italia), pero también cuenta detalles de batallas
emblemáticas como el asedio de Tito a Jerusalén, la evolución del futuro
emperador Trajano desde la adolescencia a la madurez, y los desvaríos del
temido emperador Vespasiano.
Posteguillo se introduce en la mente de los protagonistas,
se pone en su piel y lo transmite sobre el papel con una gran habilidad. La
narración va intercalando distintos momentos y la descripción de las batallas
no se hace pesada, pues además de
abordar la parte estratégica, los sentimientos de los personajes afloran en cada
una de sus decisiones y eso dota al hilo de más humanidad y lo hace más ameno.
Se agradecen los apéndices de las últimas páginas del volumen de tapa dura, que es el que yo me he leído, donde además aparece un
glosario de términos latinos y dacios, árboles genealógicos, mapas de
distinta índole e ilustraciones de diferentes tipos de gladiador.
Una lectura amena e interesante que recomiendo a todo el
mundo.
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