Cualquier excusa es buena para buscar un hueco en el día y dedicarlo unos minutos a nosotros mismos. Párate un momento, olvídate de los problemas, del trabajo, de la familia... sólo piensa en ti, diez minutos, quince o incluso media hora. Busca unos instantes, esto te ayudará a relajarte, a desestresarte y estar más tranquilo. De hecho, esta pausa puede ser la clave para ver las cosas de otro modo y valorar tu vida, incluso de forma más positiva, según la psicóloga Ana Merillas.
Minutos para relajarse
Este hábito es algo que deberíamos incorporar de forma cotidiana en nuestro día a día, porque aunque parezca un "acto egoísta", realmente es un gesto que puede ayudarnos a conseguir ese equilibrio tan necesario en la sociedad actual.
Este consejo se lo escuché en una ocasión a un doctor experto en oncología en una charla donde explicaba, entre otras cosas, la influencia que tiene el estrés en la salud. Y aunque este puede repercutir de alguna manera en nuestro bienestar y no tiene que ser determinante a la hora de desarrollar una enfermedad, sí es un factor a tener en cuenta por lo que, ¡qué menos que adoptar medidas para estar más tranquilos a lo largo del día!
Esta idea está además avalada por la ciencia ya que según un estudio del British Journal of Health Psychology desarrollado por Universidades de Bath y Southampton (Inglaterra) tan solo 10 minutos de práctica diaria de atención plena contribuyen a mejorar el bienestar, aliviar la depresión y la ansiedad. También ayuda a incrementar esa motivación, que a veces hace tanta falta, para mejorar el estilo de vida, entre los que se incluyen ejercicio físico, nutrición hasta hábitos de descanso más saludables.
Recopilar los mejores momentos del día
Según explica la psicóloga Ana Merillas, el experto M. Seligman, especializado en depresión y psicología positiva, ofreció a un grupo de personas con depresión grave dedicar diez minutos antes de irse a dormir a escribir cuales habían sido sus tres mejores momentos del día. Transcurridas dos semanas, comprobó que la gravedad de los síntomas depresivos del grupo habían disminuido de forma notable.
Si esta sencilla práctica produce beneficios con una enfermedad mental grave como es la depresión, ¿qué puede ofrecer a aquellas personas que no presentan problemas de este tipo? Se pregunta la psicóloga. "Todas las personas podemos beneficiarnos del ejercicio del profesor Seligman. Tanto es así que han ido surgiendo distintas versiones del mismo. Escribir un diario de lo positivo puede tener poco que ver contigo, sin embargo, hacer fotos con el móvil de las cosas que te han gustado del día, puede ser tu estrategia para tener presente los momentos que te han hecho sentir bien", explica.
En definitiva, da igual el modo en el que lo hagas, porque probablemente si buscas ese espacio para ti todos los días, seguro que en ese instante encuentras la solución a aquello que tanto te preocupa.
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