Es posible que en alguna ocasión te hayas preguntado si las hormonas femeninas se pueden regular con la alimentación. Según la especialista en alimentación, nutrición y salud hormonal, Marta León, las mujeres podemos cuidar este aspecto de nuestro organismo a través de lo que comemos. “Interpretar la realidad teniendo en cuenta los niveles hormonales del momento por el que estamos pasando puede marcar la diferencia entre vivir con frustración o comprendernos mejor y pasar a la acción”, asegura la experta en su libro Alimentación y salud femenina. Cuida tu salud comiendo rico. (Ed.Lunwerg). Otros expertos también aseguran que la nutrición resulta clave en este sentido y que existen una serie de alimentos que pueden contribuir a equilibrar las hormonas de las féminas.
Alimentos para las hormonas femeninas
Entre esos alimentos que podrían ayudar a las hormonas femeninas (principalmente estrógenos y gestágenos) destacan la soja, cuya ingesta se recomienda durante la menopausia (aunque sobre este producto hay opiniones contradictorias), o los ácidos grasos esenciales Omega-3. También se habla de la maca andina, la levadura de cerveza, la salvia y los higos, entre otros.
Ahora bien, estas son propuestas genéricas, por ello Marta León asegura que hay que situarse en cada etapa de la mujer y saber qué es lo más recomendable según el momento en el que nos encontremos. Así, resulta necesario centrarse en los distintos desequilibrios hormonales, como la amenorrea (falta de menstruación), la dismenorrea (dolor en la menstruación), el SOP o síndrome de ovario poliquístico, la endometriosis o los problemas de tiroides.
Desde el punto de vista de esta especialista, la alimentación femenina es una “herramienta muy poderosa” para el autocuidado de la mujer. “Eso sí, siempre teniendo presente que esto es un maratón, no una carrera de velocidad.”
La microbiota
A día de hoy, ya se sabe que los buenos hábitos nutricionales implican un mejor equilibrio físico y mental. Del mismo modo, también conocemos “que la alimentación tiene un enorme impacto en la bioquímica hormonal. Pero, antes de llegar a las hormonas, una buena alimentación incide primero en el intestino y en su microbiota, ese universo bacteriano de microorganismos que habita nuestro cuerpo y que desempeña un papel tan importante en todos los sistemas. La microbiota se ha convertido en una de las áreas de investigación más importantes de los últimos años, puesto que un desequilibrio intestinal puede acabar empeorando una endometriosis, o una celiaquía puede estar detrás de un embarazo que no llega”, explica la autora en el prólogo de Alimentación y salud femenina.
Al mismo tiempo, hay que ser cautelosos pues ingerir demasiados estrógenos puede ser a su vez nocivo para la salud. Por este motivo, es aconsejable que consultemos con nuestro médico o con un experto en nutrición. De la misma manera, nos podemos informar por medio de libros, guías o manuales como este de Marta León.
Recetas para paliar desequilibros hormonales
Sin duda, una de los desequilibrios hormonales que más sufren las mujeres es el dolor menstrual o dismenorrea. Sentir molestias durante el ciclo es algo normal, sin embargo cuando este es muy intenso es necesario abordarlo y comentárselo a nuestro ginecólogo. Existen distintas opciones farmacológicas, pero podemos adoptar varias medidas. Una de ellas es aplicando calor en la zona del abdomen con una manta térmica, tumbarnos durante unos minutos bocarriba colocando una almohada bajos las rodillas o ponernos de lado llevando las rodillas al pecho.
Marta León nos propone además varias recetas para aliviar algunas de estas alteraciones de las hormonas femeninas:
Receta para la menstruación
Zumo depurativo menstrual
Ingredientes (1 persona)
- 1 tronco de brócoli
- 1 tallo de apio
- 1 manzana verde
- ½ limón
En primer lugar, lavamos todos los ingredientes. A continuación, cortamos en trozos la manzana, el tronco de brócoli y el tallo de apio, de modo que pueda entrar fácilmente por la abertura de la licuadora. Lo licuamos todo y ya está.
Si no tienes licuadora o extractor de zumo, tritura los ingredientes con una batidora y añade medio vaso de agua y el zumo de medio limón recién exprimido a la mezcla, y luego cuélalo todo.
La experta añade un consejo nutricional al final de cada receta. En este caso, asegura que el zumo que propone es una excelente manera de aprovechar el tronco del brócoli y sus nutrientes. “Además, los ingredientes en crudo son mucho más ricos en vitamina C y enzimas que si están cocinados.”
Receta para la menopausia
Y durante la menopausia, puedes probar esta opción:
Crema depurativa de alcachofas
Ingredientes (4 personas)
- Restos de alcachofas lavadas (el equivalente a 500 g de tallos pelados y hojas exteriores).
- 2 litros de agua.
Lavamos bien los restos de pelar las alcachofas junto con los tallos. A continuación, los cocemos en agua con un poco de sal y luego los trituramos en la batidora. Después colamos todos los restos de hebras y fibras y nos quedamos con el caldo verde oscuro.
Marta León apunta que ella suele tomar esta crema como sopa o que en ocasiones la utiliza para otras cremas de verduras o guisos. “Si quieres conseguir un efecto más depurativo, cocina bastante cantidad y guárdala en la nevera. Luego caliéntala y toma un vaso pequeño antes de cada comida o cena, como si fuera un primer plato; ayudará a tu cuerpo a metabolizar y a eliminar mejor las grasas de la comida”, añade.
!El libro es acierto de regalo! Con mucha información, recetas y bastante estética la fotografía.
ResponderEliminar¡¡Muchas gracias por tu recomendación!!
Eliminar