Lourdes Girón (arqueóloga): "En el Imperio romano hubo mujeres empresarias, pero es una parte de la historia desconocida"
A unos 50 metros de la Villa romana del Casale en Plaza Armerina (Sicilia), la arqueóloga gaditana Lourdes Girón, halló en 2012 durante una campaña de excavación una inscripción que mostraba el nombre de una mujer: Treptona. Este hecho fue sumamente relevante pues avala una hipótesis y es que el gestor de este habitáculo donde se encuentran las ruinas de unas termas, seguramente fuera una fémina. Es decir, la posibilidad de que hubiera mujeres empresarias o emprendedoras en Roma cobraba fuerza con este hallazgo tan evidente. Sin embargo, en la publicación científica que recogía tal descubrimiento el nombre sufrió una alteración pues la “a” desapareció y, por tanto, se masculinizó. A raíz de este suceso, la arqueóloga se propuso dar a conocer este tremendo atentado contra la historia a través de diversas acciones y de su primera novela: La Villa de las diosas (2022, Libros Indie).
Entrevista a Lourdes Girón
Lourdes Girón es oriunda de Cádiz y aunque comenzó la carrera de arqueología en su ciudad natal, la finalizó en Italia. Desde entonces participó en varias excavaciones, hasta que en 2010 llegó a la Villa Romana del Casale en Sicilia para explorar un edificio anexo con termas. Es en este lugar donde se desarrolla la novela y donde aconteció el hecho que la llevó a denunciar su experiencia negativa que además relata en su obra. Aquí acabó ostentando el cargo de Jefa de Sector hasta 2015, momento en el que decidió zanjar toda relación con este yacimiento ante lo acaecido.
¿Qué has intentado transmitir con ‘La Villa de las diosas’?
Son muchas cosas, no es solo una idea. Por un lado quería denunciar que Treptona, protagonista de la novela en el periodo romano, es real. Yo comencé en 2010 en la campaña de este espacio termal de la Villa del Casale como excavadora, pero al año me hicieron jefa de sector. En 2012, encontramos una inscripción que ponía ‘Treptona Bibas’. Esta era una especie de aclamación donde ‘Bibas’ podría significar “vivas” o “que vivas” o también podría hacer alusión a la segunda persona del verbo “beber”, es decir, “que tú bebas”, siendo la traducción literal “Treptona bebas”.
Un hipótesis avala que Treptona era una mujer romana, libre e independiente.
Esto nos hizo pensar que Treptona sería administradora o propietaria de esta estructura termal, donde también había algún interés por el vino o la gestión de un viñedo… O quizá simplemente quiere decir que Treptona era una mujer romana, libre e independiente. Además, sabemos que era nombre de mujer porque tenemos una inscripción funeraria en Nápoles en donde aparece Treptón, por lo que este es el nombre masculino y Treptona, el femenino.
Sin embargo, cuando se hizo la publicación científica el director del proyecto, el catedrático Patrizio Pensabene, quitó la “a” al nombre, es decir, nos intentó borrar de la historia. Para mí aquello se tradujo en una de esas situaciones en las que empiezas a plantearte cosas y me pregunté por qué hay que borrar de la Historia de esta forma tan cruel a las mujeres.
El director del proyecto, el catedrático Patrizio Pensabene, quitó la “a” al nombre, es decir, nos intentó borrar de la historia.Esta fue una de las principales motivaciones para escribir la novela. Evidentemente, también me gusta escribir e investigar, y a través de este libro me gustaría llegar a una parte de la sociedad para mostrar que había empresarias en el siglo IV después de Cristo, porque los vestigios arqueológicos así lo identifican.
¿Qué pasó después?
En ese momento obviamente se cortó todo tipo de relación porque yo personalmente no concibo un atentado así contra la historia y en 2015 dejamos de excavar el sector. Después a raíz de la novela y de la denuncia a este catedrático, ediciones Bellaterra, de Barcelona, me contactó para que hiciera un estudio específico de las figuras femeninas en la Villa del Casale, y así es como comienzo a profundizar en la simbología de estas figuras. Estoy investigando, sobre todo, cómo se veía a las mujeres en aquel momento, pero recurriendo a su vez a las fuentes escritas. Lo que nos estamos encontrando y descubriendo desde un punto de vista arqueológico, es que no todo lo que nos han contado es verdad.
Igual que en la actualidad nos topamos con hombres o instituciones machistas que no transmiten toda la verdad, existen hombres que piensan igual que nosotras, que creen en la igualdad y que ayudan. Y creo que eso es lo que pudo suceder en esta Villa porque la mujer tiene una presencia bastante importante y ya no solo en esta, sino también en la estructura termal meridional, que como ya he comentado justo a la entrada tiene una inscripción con el nombre de una mujer y sabemos que es Treptona.
A partir de este momento es cuando comienzo a ver el papel de las mujeres a través de los mosaicos. Descubro la visión que se tenía de ellas desde el punto de vista por ejemplo del cristianismo justo en el momento en el que se hace religión oficial en el año 395 d.C. (año en el que se desarrolla la novela). Las mujeres cristianas van más tapadas frente a las romanas que solo llevan una túnica, pero a su vez portan varas de mando lo que significa que ostentaban el poder, de modo que toda esta simbología nos hace pensar que es necesario efectuar una relectura de lo que nos han contado hasta el momento.
Es necesario efectuar una relectura de lo que nos han contado hasta el momento del papel de las mujeres en Roma.En la Villa del Casale es muy conocido el mosaico de “las chicas en bikini”, ¿qué representa realmente?
Durante mucho tiempo los arqueólogos se han estado peleando respecto a la nomenclatura de este mosaico, porque realmente lo que muestra es a mujeres haciendo deporte. Este mural se descubrió en 1948 y un poco por la mentalidad de la época se empezó a hablar de él como el mosaico de las mujeres en bikini. Sin embargo, en realidad llevan una vestimenta deportiva que además está muy bien definida en la época romana. En la parte de arriba lucen una fascia pectoralis, una tira que se usaba como sujetador; y en la de abajo, el subligaculumm, que utilizaban los dos sexos.
Los colores aportan asimismo más información. El granate, denota riqueza y una posición elevada, mientras que el verde, era un código para indicar que personas del mismo sexo se sentían atraídas. El dorado, se usaba mucho en ambientes religiosos, es sinónimo de divinidad y poder.
Por otro lado, estas mujeres muestran unos músculos muy marcados y definidos, por lo que desde mi punto de vista quien mandó hacer este mosaico quería representar una actividad: el deporte. Hay que tener en cuenta que en la época griega había juegos femeninos olímpicos, los juegos Hereos, que viene de la diosa griega Hera, y quizá con toda probabilidad en época romana también se seguían practicando.
Quien mandó hacer este mosaico quería representar una actividad: el deporte.La novela se desarrolla paralelamente en dos épocas, el siglo IV d.C y la actualidad: ¿de las diez mujeres que aparecen en la trama antigua solo es real Treptona?
Sí. El resto, son fruto de mi invención y para darles vida me he inspirado en las mujeres que aparecen en el mosaico de las chicas en bikini. Mezclo ficción y realidad, por eso catalogo a la novela de histórica fantástica.
¿Hay más vestigios que indiquen que había mujeres empresarias en la Roma de aquel momento?
No solo había empresarias, tenemos inscripciones de mujeres propietarias de terrenos en Andalucía, de explotación de olivares, de ánforas, propietarias de los barcos que iban desde Hispania a Roma… En Cagliari, Cerdeña, hay un sarcófago del siglo III -IV, d.C., en el que se representa a la difunta como una empresaria del vino, es decir, una mujer que lo fabricaba y lo vendía.
Lo que yo quiero con esta investigación y mi novela es mostrar que en época romana había mujeres como en la actualidad, mujeres empresarias, emprendedoras, que tenían propiedades…, aunque nos han contado algo diferente. Es cierto que estaba la figura del pater familias y una serie de leyes en las que se establecía que los hombres mandaban, pero en las excavaciones estamos descubriendo que no siempre era así.
¿Cuáles van a ser tus siguientes pasos en este sentido?
Digamos que hay algo que no cuadra y por ello mi lema es equilibrar la historia porque hay muchos matices, sobre todo en la historia de las mujeres, que se han tapado o no se quieren transmitir, pero dentro del mundo científico cada vez somos más las que estamos contando o denunciando esto. Este es el caso de María Isabel Fernández García o Margarita Sánchez Moreno, ambas catedráticas de la Universidad de Granada, por citar algunos ejemplos.
Hay sacar a la luz que las mujeres también hemos formado y somos parte de la historia.Hay una parte del feminismo que se pelea, pero nosotras no. Nos estamos uniendo y pasando información, y nuestra meta es equilibrar la balanza y hacer algo diferente. Mi intención no es competir con nadie, simplemente se trata de sacar a la luz que las mujeres también hemos formado y somos parte de la historia, que hemos tenido presencia significativa como se demuestra en figuras que no se han podido esconder como Hipatia o Cleopatra y muchas otras referencias. Nos olvidamos del papel de la mujer y en muchos casos solo se la ve como un añadido, y esto es lo que tiene que cambiar.
Para mi hombres y mujeres, somos todos iguales, queremos convivir y ayudarnos. Esta es mi forma de ver el feminismo, que no es tanto el género, sino más bien la condición humana.
'La Villa de las Diosas'
La Villa de las Diosas es una novela que se desarrolla en dos espacios temporales donde en el primero se cuenta la historia de 10 mujeres que vivieron en una villa romana en el centro de Sicilia y que debido a los tiempos convulsos por la muerte del Emperador Teodosio en el 395 D.C. y el auge del cristianismo, la situación les llevó a tomar decisiones dolorosas e inesperadas para intentar salvar sus vidas. El robo de las sagradas escrituras crearía un cisma que llegaría hasta la actualidad.
El segundo escenario tiene como trama los caminos de dos arqueólogas, Elisa y Arantxa, que se cruzan para intentar devolver a la humanidad esa saga de manuscritos.
La leyenda de las “brujas delirantes” será el punto de partida para desenterrar los orígenes de una historia cruel que jamás debió pasar que hará, sin duda, temblar los cimientos de una institución con más de 2000 años de antigüedad.
Lourdes Girón
Lourdes Girón es doctora en Arqueología por la Universidad de Cádiz y fundadora del Mediterranean International Centre os Studies. Ha realizado diversas campañas arqueológicas como Jefa de Sector (2010-2015 ) en las Termas Meridionales de la Villa Romana del Casale ( Sicilia ) donde se desarrolla esta novela.Actualmente, Lourdes Girón coordina el Proyecto Internacional “Scavi Archeologici nelle Fortificazione Timolontea , Gela ( Sicilia )” ciudad helenística apenas excavada. Sus líneas de investigación versan sobre el estudio de las mujeres en la Arqueología Griega y Clásica y los orígenes del patriarcado.
Comentarios
Publicar un comentario