Probablemente en más de una ocasión habrás escuchado que tomar un alimento de temporada es mejor que uno que no lo es, pero ¿sabes por qué? Los expertos defienden esta postura y tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO), recomiendan la ingesta de alimentos frescos de cultivos cercanos y de temporada. Veamos la ventaja de estas prácticas y de lo que en definitiva se considera una alimentación sostenible:
Características de los alimentos de temporada
La composición nutricional de los alimentos de temporada es más completa. El clima, las condiciones de cultivo, la maduración y el tiempo de almacenaje del alimemto inciden en sus cualidades nutricionales y organolépticas, es decir, textura, aparencia y sabor. Así, un alimento de temporada conserva mejor todas sus propiedades, explica la doctora Dolores del Olmo, del servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Severo Ochoa y miembro del Área de Nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
Al mismo tiempo, estos alimentos suelen ser más baratos: "Las cosechas (en frutas y verduras) y el ciclo de reproducción de los animales (en pescados y carnes) permiten que, durante un periodo concreto del año, su disponibilidad en las tiendas sea mayor, por lo que al aumentar la oferta, el precio desciende", asevera la doctora.
Además, en general un consumo de productos de temporada genera menor impacto ambiental, pues se favorece que provengan de la actividad agrícola local. Consumir almentos cercanos al lugar de residencia tiene sus ventajas, pero esto no siempre ocurre así. Es más, el simple hecho de poseer invernaderos para disponer de frutas y verduras fuera de temporada genera un gasto de energía considerable. "Esto puede requerir más energía que el transporte desde zonas con un clima más cálido. Muchos de los alimentos que consumimos viajan entre 2.500 y 4.000 kilómetros antes de ser procesados y embalados para su comercialización en nuestro país”
Ahroa que ya sabes algo más del porqué es bueno tomar alimentos de temporada, aprovecha lo que toca en verano: mucha sandía, melón, melocotón... y a disfrutar de las cualidades nutricionales de los alimentos que nos ofrece el buen tiempo.
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